viernes, 7 de agosto de 2015

JUNO

Sentir que has perdido algo, sentir que hay algo dentro de ti que se ha perdido que ha caído. No diría que tenia esperanzas de tener algo con "esa persona" simplemente era ese algo que me hacia pensar que la persona que mejor me conoce me querría. La persona que mejor se ha portado conmigo que incluso sin saber que lloraba por dentro me hacía reír a pleno pulmón y olvidarlo todo. 
No tenía la esperanza de que fuera mi pareja ni nada por el estilo pero esperaba que alguien volviera a quererme como antes, de tener a alguien ahí que me hiciera valer la pena.
Pero no duele eso, lo que me duele es que es el momento que más he temido durante meses, el momento en que empiezo a perder a mi mejor amigo. Duele pensar que por no hacerme daño se alejara cuando se que lo voy a necesitar ahí, cuando se que necesitaré que me haga reír y que se me olvide todo lo malo y él en el fondo tendrá siempre un límite impuesto.
Pensar que una persona que lo ha sido tanto va a empezar a serlo menos porque hay que mantener una distancia, que lo veré cambiar con respecto a mi y que todo sea mi culpa y sentirme como una mierda por haberle hecho sentirse incomodo. 
Pensar, pensar y callar cuando a la hora de la verdad tenia que haber hablado. Y llegar a casa derrumbarse ver Juno y escribir en un desolado blog todo lo que no he sido capaz de hablar.
Porque siempre me arrepentiré de no haberle dicho a la cara que es mi mejor amigo, que cada vez que he sonreído en los últimos meses ha sido haciendo el gilipollas con él. Y que un estúpido sentimiento no tiene nada que ver con todo lo que lo quiero. Que es un cariño de hermano de querer saber que dentro de unos años cuando inevitablemente nos separemos él estará ahí para una cerveza o dos o diez. Que nunca he hablado tan enserio cuando digo que es mi mejor amigo y que si pudiera tirar ese trozo de mi que hace que todo se complique lo haría.
Pero es tarde porque no he tenido los cojones de hacerlo, porque una vez más me he hecho pequeña, soy gilipollas. 
Prefiero sufrir por un sentimiento que llorar por sentir que he pedido a mi mejor amigo.